Corría el mes de marzo de 1970 y el mundo estaba a punto de recibir una de las más amargas noticias para quienes habíamos crecido con la música del cuarteto más famoso en las últimas décadas, el rompimiento de The Beatles que se daría a conocer un mes más tarde. Pero había otra noticia que antecedería este shock: La muerte de Paul McCartney.
Un mito que se hace todavía dudoso en nuestros días a través de las redes cibernéticas pero que tiene como tal una larga y misteriosa historia detrás donde muchos —incluso yo— dudamos de quién o quiénes fueron los que propagaron ese mito que incluso existen quienes, hasta la fecha, la creen posible. Sí, no se rían amigos.
¿Cómo empezó la macabra historia?
Meses antes, a finales de octubre de 1969, a unas cuantas semanas de que saliera a la venta su último álbum del cuarteto, Abbey Road, un disc jockey de radio en la ciudad norteamericana de Detroit, Michigan, Russ Gibb, recibió una llamada anónima en su programa que transmitía por la WKNR-FM que le aseguraba que Paul había muerto en un accidente tres años atrás y había sido cambiado por un doble, un actor preparado musicalmente y aceptado por su gran parecido a McCartney, William Campbell y que Lennon, decepcionado y en pleno “luto” había dejado algunas pistas para los fans en algunos de los discos a partir de la canción Strawberry Fields Forever donde al final de la misma se escucha claramente una voz cavernosa que dice: “I buried Paul…” (yo enterré a Paul).
Russ, sin dudarlo puso varias veces la canción, una obra maestra que empezó a grabarse a finales de 1966, inspirada en la niñez de Lennon de acuerdo al lugar donde pasaba el tiempo, Strawberry Fields, un orfanato de Liverpool, hoy prácticamente un monumento icónico para visitar en esa ciudad portuaria para los seguidores de The Beatles. Justo subía los niveles de audio para escuchar la macabra voz que en realidad se trataba de la misma voz de John, modulada por varios efectos en las cintas magnéticas del estudio 2 de Abbey Road, junto con otros efectos que llevaba la canción en plena época en donde experimentaron con gran cantidad de nuevos instrumentos y velocidades que aplicaban a la cinta. La voz de Lennon decía en verdad: “Cranberry sauce” (salsa de frambuesa) pero en ese momento, los enloquecidos fans empezaron a buscar más detalles y pistas.
La noticia llegó a Paul.
¿Quién diría que esa noticia, tan falsa como un billete de tres pesos, tuviera un recorrido mercadológico y poco sensato ante lo que vivían The Beatles en ese momento?
En esos días la ruptura del grupo estaba al borde de un precipicio. John y Yoko se enfrascaban en teorías y prácticas de un terapeuta, Arthur Janov, quien trataba de conseguir a base de terapias de choque, a base de gritos, una limpieza espiritual para alcanzar la estabilidad emocional de la pareja que entonces sufrían la pérdida del segundo bebé y la afectación que les causaba la adicción a las drogas. Por otro lado, Paul harto de los pleitos tanto con John, George y Ringo que se habían puesto de acuerdo con Allen Klein para ser el sucesor de Brian Epstein y poner en sus manos la suerte del grupo y de su compañía Apple que ya manejaba serios números rojos en sus libros de contabilidad, decidió irse a su granja en Escocia para olvidarse del asunto y grabar en su estudio particular lo que sería su primer álbum solista, McCartney, hecho muy artesanalmente con Paul tocando todos los instrumentos.
La central telefónica de las oficinas de Saville Road # 3 sonaba incesantemente con decenas de llamadas por día preguntando sobre la muerte de Paul, lo que orilló a su representante Derek Taylor a salir a una conferencia de prensa para desmentir la noticia e informó que Paul se encontraba en perfecto estado de salud en su granja en las colinas de Campbelltown (¿coincidencia con el apellido de su doble Campbell?) Escocia. Los reporteros, incluidos unos de la prestigiosa y famosa revista Life, que había sacado algunos gloriosos números dedicados a The Beatles, salieron en su búsqueda a la granja de Paul investigando, preguntando casa por casa a granjeros y lugareños hasta dar con el famoso lugar, en donde Paul casi ignoraba lo sucedido sobre su propia “muerte”.
McCartney, al saber lo acontecido a partir del programa de Gibb, simplemente le dijo a Taylor que “dejara pasar las cosas” sin darle mayor importancia. Sin embargo, cuál sería su sorpresa al ver llegar a un singular grupo de periodistas y fotógrafos rondando las cercas de su granja, alertado por su perra Martha que les ladraba. Paul enfurecido les arrojó un balde de agua sucia para alejarlos y gritarles unos cuántos improperios. Linda Eastman, su esposa, con Mary su recién nacida hija en brazos corrió a decirle a Paul que se calmara y que justo había reconocido a los fotógrafos de Life y que no sería buena idea hacerlos correr. Paul, siendo tan condescendiente con su esposa, tomó su Land Rover y se lanzó a alcanzarlos para pedirles disculpas y prometerles un número especial después de haberles dicho: Juro que no morí.
Las pistas
La mercadotecnia norteamericana no quedó satisfecha con la primera pista de Strawberry Fields, sino que llegaron a publicar un número especial sobre el escabroso tema. Paul McCartney Dead, The Great Hoax que llegó a venderse por millones enumerando una serie de teorías ocultas tanto en las letras de las canciones como en las portadas de los discos de The Beatles, las cuales, en su mayoría y fama damos a conocer a continuación:
1. Álbum Sgt. Pepper´s Lonely Hearts Club Band (1967)
– En A Day In The Life se nombra el supuesto accidente automovilístico en el cual Paul perdió no solo la vida sino la cabeza en donde dice: He blew his mind out in a car, He didn’t notice that the lights had changed A crowd of people stood and stared. They’d seen his face before (Él voló su mente hacia fuera en un auto. No notó que la luz había cambiado. Una multitud se detuvo ahí en el lugar. Ellos habían visto ese rostro antes) Sin embargo John diría años después que se trataba de una noticia vista en un diario de un conocido de ellos, Tara Browne, que efectivamente había muerto en ese accidente.
– La portada interior muestra a los cuatro sentados con sus uniformes de la Banda de Corazones Solitarios del Sargento Pimienta, en donde el uniforme azul que portaba Paul tiene un parche escudo en el brazo izquierdo que muestra las siglas OPD que en inglés lo interpretaron como Official Pronunced Death (Oficialmente Declarado Muerto). En realidad, era un parche de la Ontario Police Department que se le ocurrió a Paul ponerlo en el hombro izquierdo de su uniforme.
– En la contraportada Paul aparece de espaldas de tal forma dando a saber que era un doble quien lo sustituía. Y si, en realidad no era Paul el que está de espaldas, sino Mal Evans, su eterno asistente quien tomó su lugar ya que McCartney no estuvo ese día en la sesión de fotos.
– La portada sin duda da más mensajes. El escenario en general da muestra que se trata de un funeral. La banda está encima de una supuesta tumba que detalla la palabra BEATLES formada por claveles. Hay una mano encima de Paul que de acuerdo a las religiones védicas de la India significa que cuando hay una mano encima de una persona significa que está muerta. Hay un bajo para zurdos como el Hofner que siempre usó Paul formado por flores blancas. Hay otros Beatles de cera donde Ringo ve con un rostro de tristeza la tumba y Paul y George viendo con una mirada perdida mientras que John sonríe. Y la pista más impresionante es si uno pone un espejo en medio de la tambora sobre las palabras LONELY HEARTS se forma la palabra HE DIE (Él murió). Sorprendente.
2. Álbum Magical Mystery Tour (1967)
– The Beatles aparecen disfrazados como animales. En torno a su vestimenta, John es una morsa, Paul un hipopótamo, George un conejo y Ringo un pájaro. De acuerdo a la canción que se grabó un año después para el Álbum Blanco, Glass Onion, menciona la palabra I had another clue for you, the walrus was Paul (Aquí tengo otra pista para ti, la morsa era Paul) en el sentido de que la morsa, de acuerdo a la mitología escandinava, significa la muerte.
– En una parte del filme Paul aparece vestido como militar británico sentado en un escritorio de la oficina de reclutamiento del ejército y hay un letrero que dice: I WAS (Yo fui).
– En la parte final donde cantan Your Mother Should Know, The Beatles salen con unos fracs blancos adornados con un clavel rojo en la solapa izquierda, menos Paul que lo lleva de color negro en referencia al luto que debería llevar el famoso doble.
3. Álbum The Beatles (El Álbum Blanco).
– Como mencionamos la canción Glass Onion nos da esa pista, The Walrus Was Paul.
– En Revolution 9 la frase Turn me on, dead man (enciéndeme, hombre muerto) es lo que se escucha si se pone al revés la voz que dice al principio number nine, number nine.
4. Álbum Abbey Road.
– La portada lo dice todo. Los cuatro caminan atravesando el paso de cebra (peatonal) frente a los estudios de EMI en Abbey Road. John encabeza la fila, vestido de blanco representando a un ángel que recibe en el cielo a un difunto. Ringo, de traje negro es el perfecto ministro que da el mensaje fúnebre, Paul es el cadáver, descalzo y caminando a paso distinto que los otros tres, con un cigarrillo en la mano derecha siendo el zurdo y los ojos cerrados. Para finalizar, de mezclilla George, el enterrador. Atrás está un famoso bochito un VW blanco con la placa trasera que dice IF 28 (Sí 28) referente a que, si viviera Paul, tendría 28 años. (Totalmente falso, Paul tenía 27 en ese entonces).
– La contraportada marca un final próximo. Sobre la pared pusieron a manera de letrero que menciona el nombre de las calles en Londres, la palabra BEATLES con una grieta que los parte encima de otro letrero que dice ABBEY ROAD.
En fin, hay quizás muchos más ejemplos ocultos por ahí, pero éstos fueron las pistas más sobresalientes para crear este mito a 50 años de haber salido al público.
Pero no hay de qué preocuparse, PAUL ESTÁ VIVO como lo dice su álbum PAUL IS ALIVE. Un mito que si deja dudas de quién o quiénes lo difundieron y ganaron buenas cantidades por la venta de revistas y discos para buscar pistas. Pareciera mentira que los accidentes que habría sufrido Paul en verdad en 1966 y 1967 serían indicios para éste mito. Paul sufrió un accidente de motocicleta donde perdió un pedazo de diente y magulladuras, mientras que su auto, un mini Cooper, fue chocado por su chofer Mohammed Hadjij a principios de enero del 67 saliendo en la prensa y que fue uno de los tantos motivos para recrear ésta fabulosa historia, pero al fin si hubo un desenlace triste para muchos que fue la disolución del grupo que se dio a conocer en abril de 1970. Tema para escribir más adelante.
Y después de todo… ¿Ustedes, que opinan? ¿Paul está vivo?
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