Más de un beatlemaníaco lo habrá hecho en forma rudimentaria, tal vez lo haya intentado o al menos pensado. Me refiero a juntar cronológicamente canciones que los cuatro realizaron por separado. Si en ocho años de carrera The Beatles lograron producir tamaña obra en base a una gran cantidad de composiciones originales, ¿qué hubiera pasado si no se separaban y seguían juntos? Difícil encontrar una respuesta a un problema contra fáctico. Puede ser que hubiesen languidecido con el tiempo, o que cada tanto sorprendieran con una nueva obra o tal vez se hubiesen vuelto a separar. Vaya uno a saber. Podemos rastrear manualmente las composiciones de los cuatro de Liverpool en sus etapas solistas y, más allá de los vaivenes lógicos, de los cambios en la industria y en los gustos musicales, también nos encontramos con una profusión creativa con grandes picos de originalidad.
El actor estadounidense Ethan Hawke (1970) realizó algo por el estilo y, amparado en su popularidad, el experimento cobro dimensiones insospechadas; como las que usualmente alcanzan aquellas que tienen como protagonistas a The Beatles. Hawke quien nació el año en que se separaban, es un confeso fanático del grupo y, luego de su divorcio de la actriz Uma Thurman, decidió preparar un gran regalo para su hija Maya cuando cumplió trece años en 2011. El proyecto que Hawke denominó The black álbum (El álbum negro) consistía en realizar un disco triple con cincuenta y una canciones que los integrantes de The Beatles compusieron durante sus etapas solistas. El período comprendía desde 1970 hasta la reunión de los tres sobrevivientes con las cintas de Lennon en el Proyecto Anthology en 1995. Así las cosas, el disco contenía veinte canciones de Lennon, veinte de McCartney, siete de Harrison y cuatro de Starr. Hawke diseñó el packaging en formato compact disc y con un arte de tapa similar a The White álbum, pero, obviamente, con fondo negro. La idea lleva un guiño que lo presenta como un conocedor de la historia. En efecto, The White álbum representa según los especialistas, un álbum que si bien producen cuando estaban juntos (1968), parece indicar por su mixtura de géneros y estilos, el de cuatro solistas. Hawke acompañó el regalo con una carta en la que le explica a su hija los motivos que llevaron a la realización de ese obsequio. Luego, esta anécdota fue llevada al cine y la idea de Hawke cobró gran popularidad. La película, dirigida por Richard Linklater, guardaba también otras cuestiones que la revestían de originalidad. En el año 2002 comienza la filmación de Boyhood (Niñez) proyecto que tiene como protagonista a Hawke y lleva casi doce años de filmación hasta 2013. La idea es contar la vida de Mason Evans desde sus seis hasta los dieciocho años. Para ello, el director fue tomando distintas escenas cada año para dar cuenta del crecimiento del chico que en la ficción es hijo de Hawke. Veamos el trailer del film:
https://www.youtube.com/watch?v=kbwc4AJ7I2M
En el año 2011, el director Linklater decide incorporar el hecho de que el padre le regale para el cumpleaños de 15, The Black Album a su hijo. Se lo entrega a un descreído adolescente durante un viaje en auto, y para que pueda entender el gesto le dice: “Cada vez que escuchas demasiadas cosas en solitario, se convierte en una carga. Pero los pones uno al lado del otro y comienzan a elevarse entre sí. Y entonces puedes escucharlo: son The Beatles “. Pero mejor, veamos bajo la órbita de Linklater, cómo es que eso sucede:
Luego de muchas idas y vueltas, Hawke reveló en 2014 en un conocido sitio web la lista de las canciones que había elegido. Rápidamente el álbum comenzó a circular en versión “bootleg” (pirata). Algunos críticos elogiaron la selección realizada por el actor y sostenían que las composiciones del disco daban cuenta de la madurez compositiva alcanzada. La lista de las cincuenta y una canciones es extensa como para detallar, además, como es de esperar, si colocan The Black álbum en el buscador, el oráculo los guiará hasta algún sitio de Youtube donde encontrarlo. Incluso ha llegado hasta Spotify.
Dejamos aquí para que cada uno, con su corazón Beatle, repase la carrera solista de los cuatro y seguramente pueda armar una lista personal y maravillosa. Solo como un ejemplo, si tomamos del bienio 1971-73 una composición de cada uno podríamos armar un EP (Extended Play) como se utiliza ahora, en el que se encontrarían: “Imagine” (“Imagina”) de John Lennon; “Band on the run” (“Banda en fuga”) de Paul McCartney; “My sweet Lord” (“Mi dulce Señor”) de George Harrison grabada en vivo en el concierto para Bangladesh; y “ Photograph” (“Fotografía”) de Ringo Starr, que como sucediera con “Octopus garden” (“Jardín de pulpos”), contó con una ayudita de su amigo George Harrison. La elección hubiera significado dejar afuera temas como “Jeleaus guy” (“Muchacho celoso”) de John Lennon, “Live and let die” (“Vivir y dejar morir”) de Paul McCartney; “Give me love (Give me peace on earth) (“Dame amor, Dame paz en la tierra”) de Harrison; o “It don´t come easy” (“No viene fácil”) de Ringo Starr. Todas ellas compuestas en el mismo bienio. Por eso, para no ser injustos y además para poder compartir la experiencia que relata Hawke, les dejamos un link con parte de The Black Album para que, en algún viaje, o simplemente en algún momento donde necesiten elevarse, escuchen en continuado como siguió la historia.
https://www.youtube.com/watch?v=WXMv6PG9K5o&t=25s
Buenos Aires, 10 de mayo de 2021.
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