Traducción: Tere Chacón.PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN

El nacimiento de The Traveling Wilburys fue un afortunado accidente. El Departamento Internacional de Warner Bros. Records le había pedido a George Harrison que creara un Lado B para This Is Love, un sencillo de su álbum Cloud Nine. En esa época se acostumbraba acompañar a un Lado A con una canción inédita, lo que le daba un valor adicional en ventas a los sencillos.

Esto era a mediados de 1988. Cloud Nine había salido. George, junto con su co-compositor Jeff Lynne y sus amigos Bob Dylan, Tom Petty y Roy Orbison había estado pasando tiempo en el estudio de Dylan. Supongo que George pensó que mientras sus amigos estuvieran a la mano, ¿por qué no usarlos para esta nueva canción?

Un par de días después George llegó a mi oficina para tocar el nuevo Lado B. Fuimos a la oficina de Lenny Waronker, el Director de Artistas y Repertorios de la compañía, para que él pudiera escucharlo también. George puso entonces Handle With Care. Nuestra reacción fue inmediata. Esta era una canción que sabíamos que no podía desperdiciarse en un Lado B. La voz de Roy Orbison era impresionante. Realmente amé la forma de tocar guitarra de George. Le habían dado al clavo. Lenny y yo tartamudeamos y les pedimos: “¿Se podría convertir esto en un álbum?” (también sospechaba que tal vez George tenía ganas de tener otra banda).

Se lo recomendamos firmemente. George sintió la espontaneidad de la música y su fuerza sólida. Siempre tuvo el instinto. Siendo tan inteligente como era, tenía una habilidad sorprendente para juntar a la gente. Piensen en el Concierto para Bangladesh… sólo George Harrison pudo hacer que sucediera.

Una vez que se concretó la idea de un álbum completo, George tomó el liderazgo. Los cinco artistas (Harrison, Lynne, Petty, Dylan y Orbison) decidieron no usar sus nombres reales. George y Jeff habían estado llamando al equipo del estudio (los limitadores y ecualizadores) como “wilburys”. Así que primero le pusieron al nuevo grupo The Trembling Wilburys. Jeff sugirió que se cambiara a “Traveling”. Todos estuvieron de acuerdo.

El grupo nació: cinco tipos con una posición muy sólida ganada por derecho propio pero fue George quien creó este ambiente Wilbury en donde las cinco estrellas pudieron disfrutar de una colaboración que no implicara el ego de nadie. Todos cantaron, todos compusieron, todos produjeron y se divirtieron mucho haciéndolo.

Ustedes podrán escuchar la humildad y la buena naturaleza de George en la música de los Wilbury. En mi opinión, fue la colaboración perfecta. Los cinco eran buenos amigos y se admiraban y respetaban entre sí. Roy Orbison era alguien a quien ellos idolatraban. Por supuesto, también sentían un respeto especial por Dylan. Sin embargo, Bob estaba más cercano a ellos por ser su contemporáneo así que fue Roy quien le dio al proyecto ese brillo especial de los años iniciales del rock ‘n’ roll.

Reflexionando en esto recordé que unos años antes, cuando mi esposa Evelyn y yo estuvimos en Londres, George nos invitó a su casa, Friar Park, para celebrar el cumpleaños de Evelyn. Roy era huésped en su casa en esa época así que tal vez esto fue un indicativo que después llevó a la formación de los Wilbury. También lo pudo haber sido la noche en la que Tom, George y Jeff (Bob no pudo ya que se había lastimado una mano) fueron a cenar a nuestra casa un año antes de Handle With Care. Para nosotros, Tom tocó una nueva canción que no había sido grabada de título Free Fallin’ con el apoyo de dos de sus futuros compañeros Wilbury. Nos gustó tanto a Lenny y a mí que le pedimos a Tom y a los muchachos que la tocaran al menos tres veces esa noche.

Tal vez aún entonces ya todos eran Wilburys. Sólo que todavía no sabían su nombre.

Con el gran éxito internacional -más de cinco millones de copias vendidas- del álbum Traveling Wilburys Volume 1, fue inevitable buscar un seguimiento. George, siendo George, tituló el segundo álbum como The Traveling Wilburys, Volume 3. Tristemente, para este moment Roy había muerto pero todavía había gran emoción cuando visitamos a los Wilbury que estaban grabando en el Wallace Neff, una casa designada en la parte superior del Cañón Coldwater. Estar con ellos en ese lugar fue realmente memorable.

Me alegro que una canción que alguna vez fue destinada a la semi-obscuridad como un Lado B se convirtiera en el catalizador de algo tan duradero y lleno de alegría. La revista Rolling Stone ha incluido a Traveling Wilburys, Volume 1 como uno de los mejores 100 álbumes de todos los tiempos.

Mo Ostin
Presidente Emérito del Consejo de Warner Bros. Records, 2007

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