Fue a principios de noviembre de 1993 cuando Depeche Mode se presentó en México, dentro del Palacio de los Deportes con su gira Devotional, ofreciendo un par de shows sin igual. A partir de ese momento los británicos contemplaron, en algunos momentos, traer sus tours a nuestro país, por lo cual trece años después regresaron con su espectáculo Touring The Angel en mayo del 2006, mientras que en el 2009 los vimos con Tour Of The Universe y en el 2018 con su Global Spirit Tour nos dejaron impresionados una vez más. Han pasado 30 años desde su primera visita y ahora la alineación cambió y quedó como un dueto integrado por Dave Gahan y Martin L. Gore, la razón fue la salida de Alan Wilder en 1994 y por supuesto la muerte de Andy Fletcher en 2022. Depeche Mode regresó a México para ofrecer tres fechas en el Foro Sol de su gira mundial Memento Mori, tres noche de un celebración con mucha devoción.
Poder asistir a un concierto de Depeche Mode es toda una experiencia la cual ahora inicia desde los movimientos de fanáticos en grupos de redes sociales, quienes convocan a llevar acciones de interacción que muy pocos llevan a cabo, pero aún así se logra darle un toque diferente gracias a ese entusiasmo que llegan a contagiar en el momento de los recitales. Pero debemos reconocer que muchos de los que adquieren un boleto no son fieles seguidores de la banda y solamente están para ser parte de un evento musical como cualquier otro. Independientemente de estas situaciones el espectáculo del dueto (que es acompañado por el tecladista Peter Gordeno y el baterista Christian Eigner) en el Foro Sol nos han mostrado que Depeche Mode está dentro de los grandes grupos que surgieron en el siglo pasado y aún se mantienen vigentes, maduros y llenos de una gran experiencia que derrochan sobre el escenario en cada instante, en cada nota y en todo movimiento.
De los dos de tres shows a los cuales tuvimos la oportunidad de asistir los días 23 y 25 de septiembre, destacamos que cada uno tuvo sus detalles que los hicieron irrepetibles, pese a que el repertorio fue casi el mismo; en uno de ellos, el 23 de septiembre, hubo un cambio en cuatro canciones, que incluyó el nuevo sencillo My Favourite Stranger, por su parte la participación de Martin L. Gore fue con Home y Strangelove y después del encore regresaron con la versión acústica de Condemnation. Para el día 25 estas cambiaron por el set list habitual, que fue con el que abrieron el jueves 21 sus presentaciones. Asimismo el audio que salió de las bocinas del inmueble fue claro y potente con lo cual llenó la atmósfera de emoción al interior del Foro Sol. En el escenario se podía apreciar una enorme letra M que cambiaba de color y se mezclaba con las imágenes que se proyectaron en las pantallas.
Depeche Mode inició sus conciertos con los dos primeros cortes de su álbum Memento Mori (2023), My Cosmos is Mine y Wagging Tongue, para dar paso a una serie de canciones que se han vuelto emblemáticas tales como Walking In My Shoes, It´s No Good, Sister Of Night, In Your Room; en el público se mezclaron diferentes generaciones, desde aquellos que escucharon y descubrieron al grupo en la década de los ochenta y noventa, en emisoras como Rock 101,WFM y otras, ahora muchos de ellos convertidos en padres de familia o abuelos, quienes al escuchar Everything Counts, World In My Eyes (en donde hacen un homenaje a Andy Fletcher al aparecer su fotografía en las pantallas), Stripped, I Just Can´t Get Enough o Never Let Me Down Again fue regresarlos a una época de una juventud en búsqueda de su propia música, de su propia identidad, en donde poder ver al grupo sólo estaba en sus sueños que después se volvió una realidad. Pero también se encontraban nuevas generaciones que los descubrieron en algún momento y han adoptado su música, con lo cual el legado de Depeche Mode puede descansar tranquilo.
Y para hacer aún más especiales esas tres noches se anunció que se grabarían los conciertos, para tomar algunos momentos, que serán parte de un documental, por lo que vimos la grúa con la cámara y por supuesto el dron que sobrevoló el inmueble para registrar cada momento desde las alturas. La energía de Gore y Gahan se mantiene, con el vocalista girando y moviendo las caderas sobre el escenario, contoneándose sensualmente y mostrando que su voz permanece potente y Martin tocando con maestría las guitarras y teclados, además de hacer coros, segunda voz e interpretar un par de temas, que provocan regocijo en el público, quienes en varias ocasiones corea a la par canciones que se han vuelto himnos. Después del encore, y aún con Enjoy The Silence presente en las memoria inmediata que dio el primer cierre, el dúo regresa al escenario para darnos un tema acústico con Waiting For The Night/Condemnation, para después escuchar la entrada de I Just Can´t Get Enough con lo que el lugar se prende y todos brincan, cantan y bailan, Depeche Mode no permite que la fiesta decaiga, que haya un respiro y con Never Let Me Down Again, más Personal Jesus cimbran el inmueble y dan por terminada una serie de noches que permanecerán en el recuerdo de los asistentes que vivieron cada instante de esos tres recitales.
- Setlist del 21 y 25 de septiembre: My Cosmos is Mine, Wagging Tongue, Walking in my Shoes, It´s No Good, Sister of Night, In Your Room, Everything Counts, Precious, Speak To Me, A Question of Lust, Soul With Me, Ghosts Again, I Feel You, A Pain That I´m Used To, World In My Eyes, Wrong, Stripped, John The Revelator, Enjoy The Silence, Waiting For The Night, Just Can´t Get Enough, Never Let Me Down Again, Personal Jesus.
- El repertorio del 23 de septiembre fue el mismo del 21 y 25 con los siguientes cambios: My Favourite Stranger por Speak To Me, Home y Strangelove por A Question of Lust y Soul With Me; Condemnation por Waiting For The Night.
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