En el programa de gira (tour book) de Up and Coming de Paul McCartney que llegó a la Ciudad de México en 2010, encontramos una sección llamada Quizzing The Band, en la cual se hacen una serie de preguntas capciosas a los integrantes del grupo de McCartney. Una de estas preguntas es cuál es el disco de Paul, post era Beatles, del cual salen más canciones para el repertorio del concierto. Casi todos, con excepción de Rusty Anderson, respondieron de manera correcta: la respuesta es Band On The Run. Para ese recital al que se refieren, el del estadio de Citi Field en Nueva York, las canciones de este álbum fueron Band On The Run, Jet, Let Me Roll It, Mrs. Vandebilt y Nineteen Hundred and Eighty Five. Pero recordemos que a través de los años Paul ha echado mano de algunas otras canciones, de este mismo álbum, en distintas ocasiones en las giras de Wings , también incluyó Bluebird, No Words y Picasso´s Last Words. Si sumamos todos estos temas tenemos que Paul McCartney ha tocado ocho de nueve tracks que incluye el álbum Band On The Run (1973).
Band On The Run, el quinto trabajo como solista y tercero con Wings, es considerado como la obra maestra de Paul McCartney, un disco sólido con nueve temas que demuestran el gran talento del exbeatle. Un álbum que tuvo una concepción difícil debido a que para ese momento dos de los integrantes del grupo Wings, el baterista Denny Seiwell y el guitarrista Henry McCullough, decidieron marcharse alegando “diferencias musicales”. Además para las sesiones de grabación, que comenzaron en el mes de agosto de 1973, McCartney eligió unos estudios, pertenecientes a EMI, en la ciudad de Lagos, ubicada en el país africano de Nigeria el cual estaba pasando por una situación político-social muy complicada.
En alguna entrevista Paul declaró, con respecto a su viaje a África: “La idea de ir a Lagos era originalmente sólo para divertirme, porque no me apetecía grabar en Londres. Quería salir y EMI tiene estudios en todo el mundo, incluido uno en la China comunista, pero como estaba muy lejos, decidimos ir a Lagos, porque haría sol y calor”.
A final de cuentas a Lagos solamente viajaron la familia McCartney, el guitarrista Denny Laine y el ingeniero de grabación Geoff Emerick, así como algunos asistentes. Por otra parte, las condiciones en las cuales se encontraban los estudios de EMI en Lagos, dejaban mucho que desear, las consolas estaban en malas condiciones, el ingeniero Geoff Emerick, se quejó del mal estado del equipo técnico. Lamentablemente el exbeatle no la pasó muy bien en aquella ciudad, algunos biógrafos del músico narran una anécdota en la cual Paul y su esposa Linda fueron víctimas de uno cacos al ser asaltados, con cuchillo, en aquel lugar.
En algún momento el ex baterista del grupo Cream, Ginger Baker, quien colaboraba con el músico y activista nigeriano Fela Kuti, quien posteriormente acusaría a Paul McCartney de quererse robar la música africana (sic), invitó a Paul a que realizará las sesiones de grabación en ARC Studios, el exbeatle no aceptó de primera instancia. pero en algún momento visitó el lugar y grabó el tema Picasso´s Last Words, en donde Ginger Baker tocó una lata como percusión.
Paul McCartney recuerda un momento de ese complicado viaje: “Pensamos que haría calor y sol en África. Pensamos que sería como un lugar de vacaciones fabuloso, pero no es el tipo de lugar al que iría de vacaciones. Es cálido y tropical, pero es el tipo de lugar en el que tendrías monzones. Estuvimos en el final de la temporada de lluvias y hubo tormentas tropicales todo el tiempo. También hubo cortes de energía y muchos insectos. A algunas personas les molesta, pero no somos unos bichos raros. A Linda no le importan las lagartijas. Pero alguien más, por ejemplo, el ingeniero que contratamos, que hizo Sgt Pepper y Abbey Road, no pudo soportarlos. Así que un par de muchachos pusieron una araña en su cama. Todo fue un poco como un campamento de exploradores”.
Aunque Paul trataba de bromear al respecto de la situación que vivía en Lagos, todo este ambiente terminó por afectarlo. Su salud también se vio afectada al tener un broncoespamo debido a que fumaba mucho, pero con todos estos problemas aún así completó las canciones del disco y regresó a Londres para continuar con los post producción, con la colaboración de Tony Visconti, en los estudios AIR, propiedad de George Martin.
Para el concepto de la portada y título del disco se utilizó la idea de la canción Band On The Run la cual nos habla de un grupo de reclusos que se fugan de una prisión. El arte de la fotografía, hecho por Clive Arrowsmith, nos muestra a estos hombres (y una mujer) que son iluminados por un reflector, entre los personajes que estuvieron dentro de esta pandilla encontramos a los actores Christopher Lee y James Coburn, así como el miembro del Parlamento Clement Freud, el boxedor John Conteh, el cantante Kenny Lynch, el conductor Micheal Parkinson, Denny Laine, Linda y Paul McCartney. Además el disco incluyó un póster elaborado con fotografías, tomadas con una cámara Polaroid, de las sesiones de grabación en Nigeria. El álbum fue publicado en Reino Unido a finales de noviembre, el día 30, de ese año 1973 y en Estados Unidos a principios de diciembre, el día 3. El disco llegó al primer lugar de popularidad en ambos continentes.
El entonces crítico musical de la revista Rolling Stone, Jon Landau (posteriormente convertido en productor y manager de Bruce Springsteen) escribió una reseña favorable en la cual mencionaba: “Band on the Run encuentra a McCartney caminando en un término medio entre la composición autobiográfica y los intentos sutiles de mitificar su propia experiencia a través de la creación de un mundo de aventuras fantástico, quizá remotamente inspirado por haber escrito recientemente Live and Let Die. Lo hace uniendo el mito de la estrella de rock y el forajido, la figura legendaria original en fuga”.
Band On The Run es una colección de canciones que nos presentan a un Paul McCartney en su madurez artística como solista. Venía de un disco como Red Rose Speedway, el segundo con Wings, que nos había ofrecido éxitos como la bella balada My Love y Only One More Kiss. Pero para esta su nueva producción discográfica el músico desplegó toda su creatividad que está latente desde el primer corte que le da título al álbum.
De acuerdo a declaraciones de Paul McCartney la idea para la canción Band on The Run habría surgido desde su época beatle cuando en 1969 asistía a esas reuniones de negocios en donde estaba involucrado el manager Allen Klein: “Comenzó con -Si alguna vez salgo de aquí – que vino de un comentario que hizo George (Harrison) en una de las reuniones de Apple. Estaba pensando que todos éramos prisioneros de alguna manera, algún tipo de comentario como ese. -Si alguna vez salimos de aquí- Y pensé que sería una buena forma de empezar un álbum. Un millón de razones, de verdad. Son un millón de cosas, no me gusta analizarlas, todas juntas. Banda en fuga: huida, libertad, criminales. Lo que sea, está ahí”.
La canción de Band On The Run está divida en tres partes musicales unidas por una idea, la primera inicia con la melancolía del prisionero que está atrapado en cuatro paredes. Para la segunda parte, la intermedia intuimos que está próxima la fuga (cuando el personaje se dice a sí mismo que si pudiera salir de ahí daría sus bienes a la caridad porque solamente necesita una buena pinta de cerveza) la cual llega en la tercera parte cuando los reos huyen como conejos que jamás serán encontrados.
El segundo corte Jet, con una orquestación de Tony Visconti, se inspiró en su perro, Paul McCartney ha reconocido que la letra es un conjunto de frases “bobas” que fue conectando como “And Jet, I thought the Major was a Lady Suffragette” de lo cual el exbeatle explicó: “Me invento tantas cosas. Significa algo para mí cuando lo hago y significa algo para el comprador de discos, pero si me piden que lo analice, realmente no puedo explicar qué es. Suffragette estaba lo suficientemente loco como para funcionar. Sonaba tonto, así que me gustó”.
Bluebird, el tercer corte de disco es una bella balada escrita por Paul durante unas vacaciones en Jamaica, se dice que el titulo de la canción es una metáfora del “poder del amor para liberar a una persona de sus limitaciones físicas y mentales”. El álbum después nos presenta Mrs. Vandebilt, un tema rítmicamente bien elaborado que da paso a Let Me Roll It, la cual fue inspirada por la frase Let Me Roll It To You de la canción de George Harrison I´d Have You Anytime de su álbum All Things Must Pass (1970).
Mamunia, que significa refugio seguro en árabe, es una composición rica en armonía en la cual se despliega ese talento que posee McCartney para crear piezas de una sencilla belleza, algo que sucede con No Words, el cual se acredita como coautor a Denny Laine, un pieza que ya se tenía desde Red Rose Speedway y se rescató en las sesiones de Nigeria, los arreglos orquestales fueron hechos por Tony Visconti en los estudios AIR. La canción Picasso´s Last Words (Drink to Me) está basada en las palabras que dijo el pintor español Pablo Picasso. Musicalmente este tema es una mezcla de varios ritmos que juegan con el coro “Drink To Me, Drink To My Health, You Know I Can´t Drink Anymore” -algo parecido a lo que había hecho con The Beatles en You Know MyName (Look Up The Number) – en donde podemos escucharlo con el ritmo de Jet o el coro de Mrs. Vandebilt como coda.
Para cerrar la obra tenemos Nineteen Hundred and Eighty Five, de la cual McCartney explicó: “Con muchas canciones que hago, la primera línea es la misma. Todo está en la primera línea y luego tienes que continuar y escribir la segunda línea. Con Eleanor Rigby tuve -recoge el arroz en la iglesia donde ha sido la boda-. Esa fue la gran frase que me inició. Con esta decía: -Nadie quedó con vida en mil novecientos ochenta y cinco-. Eso es todo lo que tuve de esa canción durante meses. Nadie salió con vida en mil novecientos ochenta … ¿seis? ¡No habría funcionado!”
Para la edición en disco compacto se incluyeron el sencillo Helen Wheels y Country Dreamer. Para la versión Deluxe del 2010 se acoplaron algunos temas,en un disco compacto extra, con las sesiones del programa One Hand Clapping y la canción Zoo Gang. Band on The Run es un álbum que aún está vigente, con un sonido que no ha envejecido y que sigue como uno de los pilares en la discografía como solista de Pual McCartney.
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